Para los que nos gusta Depeche Mode, el 31 de mayo es una fecha que no debería pasar desapercibida.
Fue un día como hoy pero del año 1980 en que Depeche Mode dio el paso definitivo a tomarse esto de ser una banda mucho más en serio. Han pasado 35 años desde que la agrupación británica diera su primer concierto en St. Nicholas School en su natal Basildon.
Si bien el nombre que los hizo famosos surgió posterior a esta fecha, fue un 31 de mayo en que Martin Gore, Vince Clarke y Andy Fletcher todavía tocando bajo el nombre de Composition of Sound, junto a un debutante de Dave Gahan, comenzaron a cimentar una historia sin parangón en la música electrónica.
Lo que vino después ya es conocido: Éxito tras éxito el grupo comenzó a despegar tras la aparición en la compilación “Some Bizarre” y su primer disco “Speak & spell” en 1981, el hasta ese momento líder, Vince Clarke, decidió emigrar buscando nuevas motivaciones, poniendo en duda el futuro de la banda.
Esta serie de hechos, más la alta expectativa que existía en la industria por la incipiente nueva agrupación, propició la llegada de un personaje muy influyente en el sonido que Depeche Mode consiguió, en años posteriores.
Hablamos de Alan Wilder, quien hoy cumple 56 años, y cuya influencia es innegable en las sonoridades maduras que rozan la oscuridad y la elegancia, marcando la época dorada en la discografía de la banda.
Sus temáticas profundas y su escaso miedo a la experimentación, permitieron que Gore, Wilder, Gahan y Fletcher, comenzaran su gradual transformación desde el terreno más pop hacia un estilo industrial que los fue distinguiendo hasta el punto culmine de Violator (1990) y Songs of faith and Devotion (1993), donde desafiando las expectativas de la industria musical se convirtieron en objeto de culto y particular influencia de un sinnúmero de bandas y solistas más jóvenes.
Desde ese anecdótico día, han pasado más de 35 años. Hay viejas heridas que se han sanado, problemas de adicción que han sido superados, logrando que DepecheMode haya encontrado el balance perfecto entre el silencio y el caos, equilibrio que los caracteriza pero que también los ha hecho una de las bandas imprescindibles de los últimos 30 años.
Sólo esperamos que Sudamérica y particularmente Chile disfrute nuevamente de su potencia en directo y que las promesas de un nuevo disco se concreten pronto. Porque Depeche Mode es única tanto en su sonido como en la incondicionalidad de nosotros los fans. Larga vida a Depeche Mode.
Acá recordamos la presentacion de ese 31 de mayo